Música en buena compañía.
Cantar es un gesto de alegría. Una expresión común a toda la humanidad que tiene una larga tradición en los pueblos del Mediterráneo.
En Calella honramos esta historia con un concurso que tenemos el privilegio de acoger. El festival «Sing for Gold» (anteriormente denominado «Canta al Mar») lleva cada año durante una semana agrupaciones de cantantes de todos los continentes.
Como un eco de las sirenas que eludió Ulises, la ciudad se llena de voces y melodías que, durante el día del concurso, cantan todas a la vez. Un espectáculo casi onírico culminado por la suave noche otoñal de la costa.
Aún sin comentarios